Entradas

El mundo de los sueños

Al caer la noche mis pestañas aletean como aves y anuncian mi llegada al mundo onírico, te revelaré mis secretos más profundos, o al menos los que he podido robarme del mundo de los sueños; pues todo se oculta tras el telón de los párpados y forzada a beber de Mnemósine regreso sin memoria ni dicha de haber estado ahí. El mundo de los sueños Imaginar mi mundo no es difícil, sólo observa la noche e imagina una roca flotante; alrededor todo es oscuro como el cielo sin estrellas; la entrada tiene una hermosa reja justo en el borde de la roca. El estilo antiguo y el metal matizado por las inclemencias del tiempo la hacen ver desgastada, pero ha nacido conmigo. Notarás que unas pequeñas linternas centellean intermitentemente por aquí y por allá, son las luciérnagas. Al centro hay un candado con forma lunar, es un candado con cualidades extraordinarias y debe ser limpiado cada noche con extremo cuidado; engañosa es su apariencia, a veces redondo, otras parece un arco de